El pasado martes 11 de junio se llevó a cabo una emotiva ceremonia de conmemoración del centenario del natalicio del histórico profesor de la UP, Luis Palomino Toledo, organizada por la Facultad de Ciencias Empresariales de nuestra universidad.
El evento inició con las palabras de bienvenida de Karen Weinberger, decana de la Facultad de Ciencias Empresariales, quien destacó la importancia de un homenaje a la vida y legado del conocido profesor “Luchito”. Nacido el 29 de abril de 1924 en Huamanga y fallecido el 2 de diciembre de 2015 en Lima, el docente dejó una huella imborrable en la Universidad del Pacífico y en el ámbito empresarial del país.
“Su pasión por enseñar, su habilidad para transmitir conocimientos desde su experiencia y acercar a sus estudiantes a la vida profesional, así como su capacidad para inspirarlos a buscar siempre la excelencia académica y alcanzar lo mejor de sí mismos, lo convirtieron en un modelo a seguir por todos los que tuvimos el privilegio de conocerlo”, sostuvo Weinberger.
Impacto en la vida universitaria
La posterior y emotiva semblanza a cargo de Manuel Romero Caro, egresado de Economía de la UP, recordó la destacada trayectoria académica y el profundo impacto humano que tuvo Luis Palomino en la comunidad universitaria.
"Lucho siempre fue más que un profesor; era un guía, un amigo y un ejemplo de generosidad y cercanía. A pesar de la diferencia de edad, su calidez y sabiduría trascendieron generaciones. Hoy, en medio de la compleja coyuntura nacional, su legado nos recuerda que el mundo necesita más líderes como él para superar desafíos con sabiduría y empatía", sostuvo Romero.
Una vez culminado su discurso, se dio paso al escenario a Rocío Palomino, hija del homenajeado, cuyas palabras conmovieron a los presentes al expresar el agradecimiento de la familia por el tributo rendido a su padre y al mencionar el amor que éste le tenía a nuestra institución.
“La pasión de mi papá por la excelencia era evidente. Para él, la Universidad del Pacífico era una institución académica de excelencia. Como todos los que fueron alumnos de Lucho Palomino saben, él era un profesor exigente, pero siempre daba el doble de lo que exigía. Todos recuerdan la enorme bondad y generosidad que tenía, siempre estaba ahí en los momentos difíciles, ofreciendo su tiempo, experiencia, sabiduría y consejo”, comentó Rocío.
Un ejemplo a seguir por generaciones
En la parte final del evento, se presentó un emocionante video en homenaje al Profesor Palomino, permitiendo a los asistentes revivir momentos significativos de su vida y carrera, así como testimonios de aquellos que fueron impactados por su enseñanza y mentoría.
Como parte de esta ceremonia, Felipe Portocarrero, rector de la Universidad del Pacífico hizo entrega de un reconocimiento a los hijos del profesor. En su discurso, remarcó la labor del homenajeado y resaltó cómo su enseñanza y ejemplo continúan inspirando a las nuevas generaciones. Tras una breve reflexión sobre el poder de la memoria y la trascendencia de eventos como este, nuestro rector concluyó diciendo:
“Esta ceremonia es precisamente lo contrario a ese olvido que borra todo con el tiempo. La memoria no es suficiente, ya que siempre es selectiva, pero este tipo de celebraciones quedan grabadas en videos, en fotos, y esperamos que no formen parte del olvido”
Al cierre de este evento, dos de los nietos del profesor Palomino pidieron decir unas palabras. “Luchito ha sido el mejor abuelo que he tenido y aunque no lo pude ver por mucho tiempo, esos años fueron los mejores de mi vida”, sostuvo el más pequeño.
“Mi abuelo fue el estándar con el cual yo medí a los profesores que me tocó tener. Agradezco mucho el homenaje que ha hecho la Universidad del Pacífico y a todas las personas que han dado sus testimonios”, dijo el nieto mayor.
