Sus pinturas sobre la independencia del Perú y la guerra con Chile están reproducidas en láminas, libros y textos escolares. Gracias a ellas, desde niños, hemos podido imaginar el momento en que José de San Martín proclamó la independencia del Perú o el instante en que Francisco Bolognesi advierte que no se rendirá “hasta quemar el último cartucho”.
“Juan Lepiani ha representado de manera realista y con gran sentimiento episodios muy importantes de la historia peruana. Sus obras podrían definirse "heroicas": los héroes no son solamente Francisco Bolognesi o Alfonso Ugarte sino también ciudadanos desconocidos quienes sufrieron y terminaron sacrificándose por la patria. El héroe es el pueblo peruano”, nos cuenta Sara Redaelli, profesora de Historia del Arte de la Universidad del Pacífico.
La Respuesta, 1891
Lepiani no fue propiamente un investigador de la historia, pero sí un estudioso apasionado. Para cada obra procuró documentarse de acuerdo con la información disponible en la época. Su obra El último cartucho, por ejemplo, representa una escena cumbre de la batalla de Arica, librada en el marco de la Guerra del Pacífico (1879-1883).
“La experiencia de la Guerra del Pacífico contribuyó a que los peruanos tomaran conciencia de formar parte de una única nación independiente, más allá de las diferencias culturales y raciales. Las obras de Lepiani dedicadas a momentos de la Guerra son el testimonio de esa conciencia nueva”, comenta Redaelli.
El último cartucho, 1894
Juan Lepiani no sólo fue un pintor de historia, sino que también cultivó el retrato, los temas de género, la pintura religiosa, la alegoría, el desnudo, el bodegón y la copia. En cuanto a la historia nacional, el pintor elaboró diez lienzos, a los que se añaden un boceto sobre La fundación de Lima y un proyecto sobre La capitulación de Ayacucho. “Un pintor-historiador es un pintor que traduce en líneas y colores episodios relevantes de la historia de un pueblo. Lepiani nació con un evidente talento artístico y a través de este don supo narrar la historia peruana de acuerdo con la información histórica que tenía a disposición”, afirma.
Proclamación de la Independencia del Perú, 1904
SUS OBRAS
Sus obras principales son: "Los trece del Gallo", "La respuesta de Bolognesi", "El último cartucho", “La proclamación de la Independencia”, "La entrada de Piérola por Cocharcas", “La conferencia de Punchauca”, entre otras.
“Si consideramos la época (entre finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX) en la que Lepiani realizó algunas obras dedicadas a la Guerra del Pacífico, en esos años en Europa se estaban poniendo las bases para el nacimiento de las Vanguardias artísticas y en el caso de la obra Alfonso Ugarte, fechada aproximadamente al 1922, el fuego de algunos movimientos vanguardistas ya se había apagado. Lepiani no estaba interesado en proponer maneras revolucionarias de mirar la realidad sino en la representación realista de acontecimientos históricos relevantes, mostrando una notable precisión técnica con respecto al dibujo y al color”, finaliza Redaelli.