​​El espíritu emprendedor, una sólida formación académica y un profundo compromiso social son los pilares que han llevado a Edinho Hayashida, egresado de Administración de la Universidad del Pacífico a transformar Doomo Saltado en un negocio reconocido por su excelencia gastronómica y su impacto positivo en la comunidad. 

Lo que comenzó como un sueño familiar, inspirado el amor de su padre de reunir a amigos y familiares alrededor del lomo saltado, se ha convertido en una empresa que ha crecido diez veces en los últimos ocho años bajo su liderazgo. Hoy, Doomo Saltado no solo deleita a sus clientes con una propuesta culinaria única, sino que también se distingue por un modelo de gestión enfocado en la satisfacción del cliente y el bienestar de su equipo. 

Éxito que trasciende lo gastronómico 

Bajo la visión de nuestro egresado, el restaurante se ha convertido en un modelo de negocio que prioriza tanto el bienestar de sus empleados como el impacto positivo en la comunidad. Dentro de su equipo, se han implementado programas de bienestar laboral que no solo mejoran la calidad de vida de los colaboradores, sino que también fomentan un entorno de trabajo motivador, solidario y altamente comprometido. 

“En Doomo Saltado creemos que el éxito va más allá de los resultados económicos, por la trascendencia que genera la sociedad”, explica Edinho. “Nuestra alianza con Enseña Perú es un ejemplo de ello: a través de esta colaboración, hemos podido contribuir a proyectos como la construcción de una biblioteca en Ventanilla, un espacio que hoy es un punto de desarrollo y aprendizaje para cientos de niños y jóvenes”, afirmó. 

Además, el restaurante ha llevado a cabo talleres de cocina saludable en diversas comunidades, transmitiendo conocimientos prácticos que mejoran la alimentación y el bienestar de las familias. Estas actividades reflejan el compromiso del negocio de ir más allá de la experiencia gastronómica, utilizando su alcance para generar cambios significativos y sostenibles. 

Un espíritu emprendedor que nació en las aulas 

Para nuestro egresado, la Universidad del Pacífico representó mucho más que una institución educativa; fue el espacio donde se sembraron las bases de su mentalidad emprendedora y su compromiso social. 

"Aprendí a cuestionar y analizar, habilidades que me han permitido tomar decisiones clave en mi vida profesional", señaló el egresado UP. "En la universidad, no solo me enseñaron conceptos y técnicas, sino también a pensar de manera crítica y a cuestionar el status quo. Esta capacidad de análisis me ha permitido abordar problemas complejos con una visión más amplia, identificar oportunidades donde otros solo ven desafíos, y tomar decisiones fundamentadas que han sido clave en el éxito de mis proyectos", dijo. 

Un mensaje para los futuros emprendedores 

"Mi consejo para quienes quieren emprender es que sea siempre con un buen propósito, muchas veces no lo tenemos tan claro y es ahí donde la experiencia en el mundo corporativo nos pueda ayudar", señala con firmeza. "Aprender de grandes profesionales y enfrentar retos en ese entorno te prepara para liderar tu propio negocio con mayor solidez". Para él, la experiencia previa proporciona una base invaluable de conocimientos y habilidades que son fundamentales cuando se da el salto hacia la creación de un emprendimiento. Este enfoque le permitió comprender la importancia de la resiliencia, la adaptabilidad y el trabajo en equipo, cualidades que considera esenciales para el éxito de cualquier proyecto. 

El éxito de Doomo Saltado es una prueba de que el talento, la formación y los valores inculcados en la Universidad del Pacífico son la base para construir proyectos que trascienden. Estamos profundamente orgullosos de contar con egresados que, como él, lideran con propósito e impacto en cada paso de su trayectoria, demostrando que el verdadero éxito empresarial no se mide solo por los resultados económicos, sino por el cambio positivo que se puede generar en la sociedad.